Los estados de Australia discuten la reapertura al turismo interior

Los estados de Australia discuten la reapertura al turismo interior

FOTO DE ARCHIVO: Vista de la Casa de la Ópera de Sídney, Australia, el 20 de mayo de 2020. REUTERS/Loren Elliott

 

Los líderes de los estados y territorios de Australia discutieron el jueves sobre la reapertura de las fronteras internas del país, un paso importante para rejuvenecer un sector turístico nacional que genera unos 80.000 millones de dólares australianos (50.000 millones de dólares), como parte del alivio de las restricciones impuestas por el coronavirus.

El primer ministro australiano, Scott Morrison, ha dicho que quiere que el grueso de las restricciones de distanciamiento social se eliminen para julio en el marco de un plan de tres fases, con el país notificando unas bajas cifras diarias de nuevas infecciones por COVID-19.





Pero la aplicación del plan federal depende de los líderes de cada estado y territorio, que provienen de partidos políticos opuestos y que mantienen posiciones encontradas en torno a la seguridad de permitir la circulación sin restricciones en todo el país.

El estado de Nueva Gales del Sur, el más poblado del país, ha pedido que se abran todas las fronteras como un paso crítico para impulsar una debilitada economía nacional.

“Para que Australia realmente avance como nación durante esta época de dificultades sanitarias y económicas, necesitamos abrir nuestras fronteras”, dijo la primera ministra de Nueva Gales del Sur, Gladys Berejiklian, a la cadena de televisión Australian Broadcasting Corp.

El turismo nacional generó una cifra récord de 80.700 millones de dólares australianos el año pasado, según datos oficiales del Gobierno, casi la mitad de todo el gasto turístico.

El subdirector médico Paul Kelly dijo el miércoles que no hay ninguna razón médica para mantener las fronteras cerradas, pero muchos estados más pequeños, que han registrado un número muy bajo de infecciones y pocos o incluso ningún deceso, siguen siendo reacios.

“Es contradictorio, Nueva Gales del Sur está pidiendo que no se use el transporte público en Sídney (…) y sin embargo se pregunta ‘¿por qué no puede la gente de Nueva Gales del Sur volar a Australia Occidental?'”, dijo el gobernador del estado de Australia Occidental, Mark McGowan.

La directora de Sanidad del estado de Queensland, Jeannette Young, apoyó los llamamientos para mantener las fronteras cerradas, diciendo que “un solo caso puede suponer un enorme revés para nuestro plan de abrir nuestras comunidades”.

El sector turístico de Australia fue uno de los más afectados por las restricciones de distanciamiento social, incluido el cierre de sus fronteras internacionales a los no residentes y la prohibición de los viajes interiores no esenciales.

En abril, casi 600.000 personas se vieron obligadas a dejar de trabajar debido a las restricciones relacionadas con el coronavirus. La tasa de desempleo de Australia aumentó al 9,6%.

En un esfuerzo por amortiguar el golpe “sin precedentes” a la economía, el Banco de la Reserva de Australia redujo los tipos de interés al 0,25% en una reunión de emergencia celebrada en marzo y puso en marcha un programa ilimitado de expansión cuantitativa. Reuters