Empresarios y comerciantes de Ciudad Guayana buscan soluciones ante el elevado costo del aseo urbano

Empresarios y comerciantes de Ciudad Guayana buscan soluciones ante el elevado costo del aseo urbano

Empresarios y comerciantes de Ciudad Guayana buscan soluciones ante el elevado costo del aseo urbano

 

 

Más de 3 años tenía Ciudad Guayana sumergida en toneladas de basura y zamuros. Un problema de salud pública que se le fue de las manos a la alcaldía del municipio Caroní.





Pableysa Ostos // Corresponsalía lapatilla.com

Los ciudadanos habían pedido a las autoridades que le dieran prioridad a resolver el problema de la basura. Y se empezaron a diseñar un ‘proyecto’ para contrarrestar las condiciones de insalubridad.

Entonces llegó Fospuca al municipio Caroní. El plan parecía sencillo, pero ambicioso. En Caroní, Fospuca cuenta con 37 rutas de recolección para resolver la desidia al que estuvo sumergido el municipio con el servicio de aseo urbano. Fuentes ligadas a la empresa señalaron que en Caroní se producen a diariamente entre 800 y 920 toneladas de desechos sólidos.

Pero desde la empresa comenzó a operar en la ciudad, se ha generado un debate por el tema de las tarifas. Los beneficiarios del servicio cuestionan los métodos que se emplean para calcular los costos y, sobre todo, la presión que han sentido para pagar facturas tan onerosas.

Hay sectores que han recurrido a introducir amparos contra el bloqueo a contribuyentes en el portal fiscal del municipio Caroní por falta de pago a Fospuca. Una de las demandas fue declarada inadmisible por el Tribunal Superior de lo Contencioso Tributario de Guayana.

Consciencia ciudadana

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La presidenta de la Cámara de Comercio e Industrias del municipio Caroní (Camcaroní), Catherine Wilson, señaló al equipo de lapatilla.com que el servicio prestado por la empresa es bueno. “Hemos visto una mejoría en la ciudad”.

“Considero que hay una necesidad de divulgar las rutas constantemente y campañas para los ciudadanos, porque por más que el servicio sea regular y constante, hay ciudadanos que siguen arrojando basura en los mismos espacios donde la arrojaban cuando no existía el servicio. Así no se podrá ver el cambio verdadero en la ciudad”, señaló Wilson.

Ante la interrogante de cómo considera la llegada de la empresa para contrarrestar la problemática de los desechos en la ciudad, la presidenta de Camcaroní respondió: “La ciudad requería desde hace mucho tiempo compactadoras para solventar la crisis en la que estuvimos sumergidos”.

Costos por el cielo

Wilson destaca que desde su sector, el problema no es que no quieran el servicio o que no estén de acuerdo con la privatización del aseo urbano. “El problema radica en el costo del servicio, resultando muy elevado y en muchos casos realmente impagable. Por esa razón hemos venido realizando una serie de acciones para sentarnos con la alcaldía y buscar soluciones en pro del municipio”.

“La alcaldía se sustenta de los impuestos municipales, por ende, somos los empresarios, los contribuyentes, quienes mantenemos a la alcaldía. No podemos permitir que cierren más empresas o que se vayan a la informalidad, debemos buscar cómo reducir la tarifa para que los contribuyentes puedan cumplir con ella”, señaló la presidenta de Camcaroní.

Mientras que el presidente de la Cámara de Licoreros (Colicor) en Bolívar, Franklin Fernández, destacó que el servicio de recolección de la basura era una necesidad de emergencia.

“Estábamos en una situación que ameritaba la necesidad, sea por vía pública o privada, de ser atendida. En tal sentido, no voy a cuestionar a quien preste el servicio. Lo que sí es evidente es una reacción de inconformidad por parte de los usuarios; no por el servicio, sino por los precios del mismo. Consideramos que hubo improvisación en escoger un método y unas tarifas fuera de la capacidad del comercio y empresario de Ciudad Guayana”, relató Fernández.

José Simón Elarba, directivo de Fospuca, precisa que “cuando mides la gestión de la empresa, se evidencia que en promedio el 88% de los habitantes están felices con el servicio, aunque el 47% considera que las tarifas son elevadas. Pero prefieren tener el servicio y pagarlo caro, a no tenerlo. Por eso creemos que no tenemos ningún problema con el servicio. Si así fuera, estuviéramos quebrados”.

Otras visiones

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El presidente de Colicor Bolívar también aseveró que el sector de licoreros es el que más ha sufrido los efectos de la pandemia, y con todo eso, le imponen la mayor carga tributaria de los aforos de la actividad económica del municipio, así como los costos de los servicios.

“Ya nos hemos pronunciado que debemos coincidir con las autoridades de gobierno para buscar soluciones que permitan que ningún sector se vea afectado. Hay que revisar los anexos de la providencia 008, esa base de determinación y los aforos, no es convincente. Es necesario coincidir con planteamientos que contribuyan a la sana convivencia en nuestra ciudad. Hemos consultado con un especialista en la determinación de costos y sí es posible ajustar y llegar a feliz término en esta situación que agobia a nuestras empresas. Vale resaltar que soy economista y puedo entender bien la situación. Con el aporte de todos, podemos ganar para embellecer nuestra ciudad”, planteó Fernández.

Mientras que el presidente de Federación Venezolana de Cámaras de Comercio y Producción (Fedecámaras) Bolívar, Austerio González, reconoció la gestión que ha realizado Fospuca en la ciudad, pero coincidió con sus colegas en cuanto a las tarifas.

“Desde sus inicios, la empresa ha realizado un trabajo acorde con lo que se tenía previsto. Hemos visto que ha mejorado la recolección de basura, así como la acumulación de basura en diferentes sectores de la ciudad. Lo que hay que evaluar es si ese servicio de recolección de desechos sólidos está acorde con lo que están cobrando tanto a las empresas, industrias, por ese servicio, y es ahí donde tenemos el criterio que no va acorde con lo que están cobrando”, comentó González.

Por su parte, Fospuca ve como exitoso el inicio de operaciones en Ciudad Guayana “en el que se han recogido más de 36.000 toneladas de basura. La empresa informa sentirse satisfecha con los más de 4.000 comerciantes y prestadores de servicios que a la fecha han cumplido con sus compromisos de pago, por lo que ratifica la promesa expresada a finales del año pasado sobre ofrecer facilidades y rebajas a quienes soliciten este acuerdo de pago en divisas por el periodo de un año”.

Cobro por metros cuadrados

El presidente de Fedecámaras precisó que el problema radica en la metodología de cobranza en la recolección de desechos sólidos por metros cuadrados.

“Hay restaurantes que si tienen 200 metros cuadrados o 199 metros cuadrados, les cobran menos de 200 dólares; pero si tienen 201-210 metros cuadrados, vemos que le cobran más de 400 dólares. Es una metodología errónea, no es adecuada, sumándole la realidad del municipio”.

En relación con los talleres de metalúrgica que operan en la zona industrial, González ejemplificó que muchos de ellos fueron construidos hace años, particularmente cuando las empresas básicas del estado Bolívar tenían otra realidad.

“Hace años la productividad de esos talleres y de las empresas básicas eran de 100%, lo cual generaba una demanda hacia esos talleres. Pero ahorita son infraestructuras que están en un 6% u 8% de su capacidad de producción o trabajo, pero si les están cobrando por metro cuadrado, estamos hablando de recibos de 800, 1.000 y 1.500 dólares. Igual está pasando con los hoteles, clínicas, grandes infraestructuras, pero con poca producción”, sumó González.

Trascendió que por iniciativa de Camcaroní, luego realizar mesas de trabajo entre todas las cámaras que hacen vida en la ciudad y la empresa, acordaron ofrecer desde enero de 2023 a los usuarios comerciales con tarifas superiores a 200 dólares, un descuento del 40% en su facturación de aseo urbano, si acuerdan un convenio de pago con la empresa que incluya, además, el relleno sanitario. De esta manera, Fospuca desmonta la así la versión de que se debe cancelar el año completo del servicio para obtener ese descuento.

“Todo comerciante cuya facturación sea mayor a 200 dólares, recibe ese descuento del 40%. Es completamente falso que para percibir el beneficio, se deba cancelar el año completo”, destacó una fuente de Fospuca.

Esa misma fuente señaló que “la evasión fiscal es del más del 90%. Es esa evasión la que hace que el municipio necesite cobrarle a la gente. Pero no podemos olvidar que cuando se sostuvo reunión con la cámara de hoteles, Foscupa otorgó el 50% de descuento, lo mismo sucedió con las clínicas y el sector educativo (ambos también recibieron descuentos)”.

González hizo un llamado al alcalde Tito Oviedo para que tome cartas en el asunto, porque el municipio Caroní en la actualidad no presenta unas condiciones económicas idóneas: el sector empresarial, productivo, las urbanizaciones, no tienen el poder adquisitivo para cancelar el servicio. “Lo mejor es establecer tasas cónsonas y luego evaluar progresivamente la posibilidad de ir adecuándose a la productividad del comercio y el estado”.

¿Qué proponen?

Ante la interrogante de cómo se debería cobrar el servicio, Franklin Fernández, destacó que “hay varios métodos, pero hay que coincidir cómo se adapta a nuestra realidad. Por eso no puedo determinar un sistema. Por ejemplo, hay algunos costos y gastos que se deben dar a conocer. Lo que sí estamos seguros es que el método planteado actualmente no es conveniente”.

Austerio González señaló que se debe buscar un sistema ideal para el cobro del servicio de recolección de desechos sólidos. “Uno es por ubicación de la basura, otro por toneladas/peso de la basura y otro puede ser por la productividad del negocio o empresa a la que le están recogiendo los desechos. Es cuestión de conversar y buscar una metodología adecuada, que no necesariamente tiene que ser por metros cuadrados. En el caso del estado Bolívar no se adecua a la realidad hacerlo por metros cuadrados. Puede ser viable por la productividad, información que tiene en sus manos la alcaldía, ya que a esta se les paga la patente”.

Por su parte, Catherine Wilson señaló que coincide en parte con las propuestas de González. “Una de las opciones es cobrar según el sector productivo en el que esté el comercio. Por ejemplo, un restaurante genera más basura que una agencia de viajes. Estudiar los sectores que generan mayor cantidad de basura: restaurantes, colegios, clínicas, hoteles. Otra opción que se había hablado era tomar como criterio los ingresos brutos, pero como hay mucha evasión actualmente por la voracidad fiscal, no va ser un indicativo real. Creo que hay que basarse en la estructura de costos de la compañía”.

“También hay que tener en consideración que una parte en la estructura de costos, que corresponde a la limpieza de las calles, plazas, limpieza de parada de autobuses, son actividades que le debería corresponder a la alcaldía y este ente debe asumir ese costo en un 100%. Aquí tenemos unas tarifas bastante elevadas, porque nos están cargando eso al sector comercial”, precisó la presidenta de Camcaroní.

Wilson afirma que la parte que corresponde pagar al sector residencial, por intereses políticos, no se la cobran, y la parte pública que compete a la alcaldía. “Entonces, aquí la pregunta también es dónde están los ingresos que percibe la alcaldía por la declaración de impuestos de ingresos brutos que tenemos que hacer los comerciantes cada mes. ¿Dónde está ese dinero? ¿Qué hacen con ese dinero?”, cuestionó Wilson.

Alternativas viables

El presidente del Colegio de Economistas del estado Bolívar, Fidel Hernández, destacó que han realizado algunas propuestas para atender el tema del aseo urbano. Una de estas es que el proyecto de factibilidad elaborado por la alcaldía del municipio Caroní para contratar una empresa privada para la recolección de desechos sólidos, debe ponerse al alcance y bajo la evaluación de los ciudadanos. Si el proyecto es considerado factible, deben sincerarse las estimaciones, cálculos y premisas antes de la puesta en ejecución.

Otra de las opciones analizadas es que la metodología para el cálculo de las tarifas, debe corresponderse con la capacidad de pago de los habitantes del municipio y los costos más utilidad esperada por la empresa contratada.

“Mientras los puntos anteriores se desarrollan, suspender el cobro de tarifas por parte de la empresa contratada, y que los costos y gastos en los que incurran durante los próximos 6 meses, sean considerados dentro de su inversión inicial (15 millones de dólares, según reza en una declaración de prensa), así como también el capital de trabajo necesario para la puesta en marcha del proyecto”.

“Deben considerarse posibles ahorros en los costos de operación de la prestación del servicio, como intercambios con talleres mecánicos especializados para el mantenimiento preventivo y correctivo de las unidades compactadoras y automotoras, suministro de uniformes, calzados y otros insumos para el personal, incidencia de la separación de los desechos por parte de las comunidades y gremios organizados antes de ser recogida por el servicio, etc. Esta sería una primera aproximación a la evaluación y propuestas en el ámbito económico y financiero para la recolección de desechos sólidos en nuestro municipio”, destacó Hernández.

Lo que opina la gente

Lapatilla.com tuvo acceso a una encuesta realizada a unas 990 personas por Datincorp.com, la cual fue solicitada por empresarios locales, aunque la base de la encuesta estaba enfocada en la situación política, en ella se anexaron unas preguntas referentes a Fospuca.

Una de las preguntas fue si los encuestados conocían la empresa que recoge la basura de desechos sólidos en su sector: 76.2% contestó “Fospuca”, 18.2% señaló “no saberlo” y 5.6% tomó la opción de “otro nombre”.

Sobre la calidad del servicio prestado por la empresa: 42.3% señaló que era “bueno”, 24.2% lo calificó como “regular” y 16.5% como “excelente”.

En cuanto a la puntualidad, 36.3% mencionó que era “buena”, 27.4% lo calificó como “regular hacia buena” y 15.9% lo evaluó como “excelente”. Y, por último, el tema de las tarifas fue calificado por 47,2% de los encuestados como “injusto”, 24.8% señaló “no saber” y 16% como “moderados”.