No hay esquina, calle o avenida de Barinas que no tenga un basurero. La putrefacción está en el ambiente y es el “gancho” para los zamuros que se posan sobre los desechos y así darse un banquete. Según el concejal copeyano Arnoldo Rubio, este cuadro tiene un responsable: el alcalde chavista Rafael Paredes.
Por Corresponsalía lapatilla.com
“Barinas se debate entre la basura y la pobreza”, dijo.
Para el concejal Rubio “a estas alturas de nuestras vidas, cuando todo el mundo hace esfuerzos para progresar, no es posible que tengamos en Barinas una palanca que solo mete retroceso, porque el chavismo tiene en la cabeza un rancho”.
“Con dolor observamos que las acciones del alcalde de Barinas para tratar de recoger los desechos sólidos, que constituyen una grave agresión contra el medio ambiente y la salud, no han dado resultados”.
Rubio expresó que “a la par de esta situación, se agrega el incremento de la pobreza, debido al declive del salario mínimo que tocó piso bajando hacia los cuatro dólares y amenazando llegar en pocas semanas a tres dólares por mes, lo que incrementa la desnutrición en adultos y niños, y presenta una amenazante hambruna”.
“En Barinas hay una barrera que no deja despegar a la administración pública que es Jorge Arreaza. Entonces que el alcalde Paredes le pida auxilio para ver si el régimen madurista es capaz de meterle la mano en los temas de recolección, transporte y ubicación de los desechos sólidos en el relleno sanitario”.
“Es necesario invertir en compactadoras de basura y crear rutas inteligentes que atiendan con eficacia la recolección. Involucrar a las comunidades a través de los consejos comunales y concientizar a la población en el pago del servicio, previo diseño de tarifas que sean aceptables y posibles de pagar debido al nivel de pobreza existente”.
Debido a que ha sido el mismo régimen de Maduro el que ha acabado con el poder adquisitivo, teniendo como consecuencia la mala alimentación familiar, Rubio exige que la bolsa Clap sea vendida cada 15 días, pero contentiva de productos de calidad, “porque el subsidio no es un regalo de ningún gobierno, es un beneficio adquirido por cada venezolano”.